Statement on passing of House Bill 2037 and Senate Bill 5919

News Release: 
Friday, March 4, 2022
Today the Washington State Senate passed House Bill 2037 and the Washington State House of Representatives passed Senate Bill 5919, two bills that expand law enforcement’s authority to use  force. Enoka Herat, police practices and immigration counsel at the ACLU of Washington, had the following statement:

“It’s upsetting to see these two bills get another step closer to becoming law. As we’ve said before, such a move will harm overpoliced communities and communities of color in particular - people the Legislature committed to protect last year when it passed a slate of bills aimed at reforming policing. These new bills do not clarify issues from last year’s legislation but roll back key protections instead. Both bills lower the standard for when an officer can use force, allowing officers to do so when they have reasonable suspicion – or just a little more than a hunch – wrongdoing took place, as opposed to having probable cause. SB 5919 even goes a step further in allowing officers to engage in vehicular pursuits on reasonable suspicion, despite the inherent danger pursuits pose for bystanders, and other drivers and pedestrians. These two bills will harm young people, communities of color, and people with disabilities. They are a dangerous step backward for Washington communities.

Efforts to roll back last year’s police reform legislation continue to take place without the needed input of the community members who will be most impacted by the overhauls. Thousands of people and more than 100 organizations spoke out against these bills. It’s incredibly disappointing for the Legislature to encourage people to engage in the process only to have lawmakers disregard the voices of residents who have been harmed or traumatized by these police practices and made it clear they do not want these bills to become law. We urge Gov. Jay Inslee to not sign these bills when they make it to his desk.”

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Declaración sobre la aprobación del Proyecto de Ley 2037 de la Cámara y del Proyecto de Ley 5919 del Senado  

Comunicado de prensa: 4 de marzo de 2022 
 
Hoy el Senado del Estado de Washington aprobó el Proyecto de Ley 2037 de la Cámara, y la Cámara de Representantes de Washington aprobó el Proyecto de Ley 5919 del Senado. Estos dos proyectos de ley expanden la autoridad de las fuerzas del orden para utilizar la fuerza. Enoka Herat, abogada de la ACLU de Washington especializada en temas migratorios y prácticas policiales, manifestó lo siguiente:  
 
Es desconcertante saber que estos dos proyectos ahora están más cerca de convertirse en ley. Como ya hemos expresado anteriormente, este paso perjudicará en especial a comunidades en donde la vigilancia policial es excesiva y a comunidades de color. Estas son las mismas personas a quienes la legislatura se comprometió a proteger el año pasado cuando aprobó una serie de proyectos de ley destinados a la reforma policial. En vez de aclarar puntos con respecto a las medidas legislativas del año pasado, estos nuevos proyectos de ley eliminan protecciones clave. Ambos proyectos de ley reducen el rigor de los criterios que establecen cuándo un oficial puede utilizar la fuerza. En lugar de ser necesario tener motivo fundado, estas medidas permiten que el oficial haga uso de la fuerza ante una sospecha razonable —o un poco más que una simple corazonada— de que ha ocurrido algún acto ilícito. El Proyecto de Ley 5919 del Senado incluso va un paso más allá al permitirle a los oficiales llevar a cabo persecuciones en vehículos si existen sospechas razonables, a pesar del peligro inherente de una persecución para transeúntes, y otros conductores y peatones. Estos dos proyectos de ley perjudicarán a las personas jóvenes, comunidades de color, y personas con discapacidades. Representan un peligroso paso hacia atrás para las comunidades de Washington. 
 
No cesan los intentos de revocar las medidas legislativas aprobadas el año pasado sobre la reforma policial sin tomar en cuenta la muy necesaria opinión de los miembros de la comunidad que se verían más afectados por los cambios. Miles de personas y más de cien organizaciones se manifestaron en contra de estos proyectos de ley. Es sumamente decepcionante que la legislatura invite a la gente a participar en el proceso para que luego los legisladores hagan caso omiso de las voces de los residentes que han sido afectados o traumatizados por estas prácticas policiales y que han manifestado claramente su deseo de que estos proyectos no lleguen a convertirse en leyes. Exhortamos al gobernador Jay inslee a no firmar estos proyectos de ley cuando lleguen a su escritorio”. 
 
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